martes, 5 de abril de 2011

NUTRICION Y SALUD






El ronroneo de los gatos es bueno para la salud

Algunos de nuestros abuelos ya lo decian: “que agusto se duerme con el gato!”. Pues resulta que según estudios realizados recientemente el ronroneo que emiten habitualmente los gatos tiene unas finalidades terapéuticas increiblemente beneficiosas, tanto para ellos como para los humanos.
A los mininos les ayuda a mantener sanos sus pulmones y su corazon, ya que el sonido del ronroneo proviene del diafragma y emite una vibracion en todo su cuerpo que tonifica sus pulmones y su corazón; y a los humanos la vibracion del ronroneo próximo a nosotros beneficia a nuestro sistema nervioso y facilita la tonificacion de nuestros músculos. El cuerpo humano dispone de unos canales o meridianos, por donde circula la energía que nos llega del Cosmos y del Centro de la Tierra, por lo tanto, cuando nuestras emociones no están equilibradas, estas corrientes energéticas se distorsionan, atacando a los órganos y vísceras de nuestro organismo; y es aquí, donde los gatos juegan una labor muy importante para nuestra salud. El gato es una animal especialmente intuitivo y a través de su gran intuición, se coloca donde ellos sienten que la energía del ser humano no está equilibrada, es decir, donde puede que haya un exceso o déficit de energía o un estancamiento. Con su ronroneo vibratorio ayudan a movilizar estas energias estancadas.
Así que, efectivemente, los abuelos una vez más tenían razon: que gusto da dormir cerca de nuestros queridos gatitos!


Pandemias de gripe y fenómenos climáticos


El fenómeno meteorológico conocido como El Niño, un calentamiento de las aguas del océano Pacífico que afecta al clima de todo el mundo, podría estar relacionado con la aparición de plagas mortales de gripe, según ha propuesto un oceanógrafo. Después de realizar una simulación con ordenador del clima mundial en el último siglo, el profesor de Oceanografía Benjamin Giese encontró que hubo un fuerte aumento de este fenómeno meteorológico en 1918, mayor incluso que el que se registró a mediados de los años ochenta y mitad de los noventa del pasado siglo, en lo que muchos creyeron que era un ejemplo más del calentamiento global del planeta.
Este suceso pudo ser un factor fundamental en la expansión de la mortalidad de la epidemia de gripe que, entre 1918 y 1919, causó la muerte de entre 25 y 100 millones de personas, según diversas estimaciones. El virus de esta pandemia, conocida internacionalmente como la gripe española, aunque comenzó en Estados Unidos, es muy similar al de la nueva gripe A, el H1N1 (en la imagen), que tantos temores ha provocado, aunque, por el momento, infundados. El investigador cree que el fenómeno meteorológico impidió el desarrollo del monzón en el sur de Asia, provocando una sequía en la India. El hambre y el ambiente seco facilitaron la acción mortal del virus. Además, El Niño originó ese año un invierno y una primavera inusualmente fríos que contribuyeron a la expansión de la gripe en Estados Unidos, desde donde pasó al resto del mundo.



Farmaceuticas acaparan el amazonas

Que la vasta extensión de la Amazonia lleva camino de extinguirse en los próximos años es algo que los grupos ecologistas vienen denunciando desde hace largo tiempo, pero que la industria farmacéutica aprovecha la sabiduría ancestral de los chamanes que viven en aquella región para hacer su agosto es algo que mucha gente desconoce. Este artículo explica cómo y por qué lo hace.

Entre 1996 y 1998 viví en la bella ciudad peruana de Cajamarca. Durante dos años desempeñé un gratificante rol de asesor de la Comarca y Municipalidad, principalmente en temas de Naturaleza, ecoturismo y desarrollo sostenible. El alcalde, Luis Guerrero, me presentó a un profesor canadiense con el que trabé amistad y acudía a todas sus conferencias. Ocultaré su nombre por razones de seguridad, pues tiene que cambiar de domicilio periódicamente. Está amenazado de muerte por las multinacionales que denuncia públicamente por todo el mundo. En sus conferencias se toman severas medidas de seguridad. No es ninguna broma. Su vida realmente peligra. Entre los datos alucinantes que proporciona, desvela algo insólito: algunas de las patentes adjudicadas a las multinacionales son plantas algodoníferas que se encuentran desde América Central a Sudamérica. Se trata de especies que producen algodón natural de diferentes colores y que son fuente de riqueza para los indígenas. No son medicinales, pero las multinacionales se apropian de sus “derechos mundiales”.

Años antes, una amiga botánica ecuatoriana cuya original y valiosa tesis hizo en la Amazonia tras convivir con los indígenas, había estudiado las plantas empleadas por los chamanes y sus propiedades curativas o venenosas. Su tesis fue presentada en la Universidad Católica de Quito. La doctora Rocío Alarcón me contó algo sobre este tema. Como existe cierta prevención contra los “gringos” y los españoles –y ella era indigenista– pensé que exageraba en la preservación de los secretos chamánicos. Conservo dedicada su valiosa tesis, sumamente importante en la investigación de la etnobotánica.

Pero volviendo al profesor canadiense, sus conferencias ponían los pelos de punta, pues mostraban el expolio que las multinacionales farmacéuticas realizan en el aspecto cultural y físico, cultivando en grandes extensiones plantas de usos milenarios que se llevan de la selva, a costa de su deforestación, sin miramiento alguno. El ilustre conferenciante explicaba cómo los expertos en biología y bioquímica enviados por las empresas farmacéuticas iban tras los secretos de los “salvajes de la selva”, realizando una ardua labor de investigación, con derroche de medios.





AYUNO : TERAPIA Y DISCIPLINA ESPIRITUAL

Hoy, cuando en el mundo occidental el ayuno en su vertiente espiritual no es más que un recuerdo, con la excepción quizá de alguna orden monástica, conviene recordar que esta disciplina ascética ha formado parte desde siempre de la vida diaria de la humanidad. Y que tiene efectos favorables tanto en el cuerpo como en la mente.

En su larga historia, el ayuno ha sido utilizado siempre con una triple función: purificación física, purificación psíquica y búsqueda de claridad espiritual. Esta disciplina puede tomar varias formas, desde la abstinencia de ciertos alimentos a la privación total de comidas y líquidos. Además, a menudo se asocia con otras austeridades, tales como la ausencia de relaciones sexuales durante el período de ayuno.

En la Biblia encontramos numerosas referencias al respecto. Los místicos cristianos más conocidos, como santa Teresa de Jesús, san Juan de la Cruz o san Francisco de Asís, fueron grandes ayunadores y consideraron esta disciplina como un medio imprescindible para el desarrollo espiritual. El ayuno se ha practicado durante siglos como preparación de ceremonias y ritos en la práctica totalidad de las tradiciones espirituales de la humanidad. Hinduismo, budismo, jainismo, judaísmo, cristianismo, islam, confucionismo, taoísmo, tradiciones amerindias y chamánicas cultivan, de una forma u otra, un método consistente en la privación de alimento sólido y/o líquido durante un determinado período de tiempo.

En las tradiciones de tipo chamánico, posiblemente las manifestaciones espirituales más antiguas de la humanidad, aún vigentes en algunas partes del globo, el ayuno ha sido y es practicado entre los chamanes de diversas culturas a lo largo y ancho de toda la geografía del planeta, especialmente como preparación de festividades concretas durante el año y para llevar a cabo rituales de curación o de acceso al “mundo paralelo” al que acuden en búsqueda de la “visión”. De ella obtendrán el conocimiento válido que les ayude en sus acciones de sanación, física o espiritual, de los individuos de su comunidad.

Los indios de Norteamérica ayunaban con bastante frecuencia con el fin de obtener un guía onírico, un sueño especial o una canción que se les apareciera en el sueño. Entre los aztecas, el aspirante a teuctli, palabra que designaba el grado más alto de nobleza, hacía rigurosa penitencia durante un año, consistente en ayunar, en la frecuente efusión de sangre y la prohibición de toda relación sexual, además de tolerar con paciencia malos tratos para probar su constancia.

Los datos que poseemos de las primeras civilizaciones de Mesopotamia y Egipto indican que cierta forma de ayuno era una parte importante de la práctica religiosa. Lo mismo ocurría también entre los antiguos persas. En Egipto, los candidatos a la iniciación en los misterios de Isis y Osiris se sometían a una abstinencia total de siete días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario